Desde hace 15 meses, una manada de elefantes asiáticos han recorrido varios kilómetros de distancia de su hábitat natural y originaria. Han atravesado campos, pueblos e incluso zonas urbanas.
Esto ha causado conmoción en los habitantes de china y en los internautas de todo el mundo, pues es un hecho que poco se ve. Las autoridades han colaborados y se encuentran monitoreando su migración y se ha podido tomar fotografías.
Pero la última foto captada llamó especialmente la atención, pues todos los elefantes se tumbaron en el suelo para descansar, luego de que fuertes lluvias hicieran más difícil su viaje.
Son 14 drones y 500 personas quienes se mantienen alertas para que la manada recorra su camino de forma segura. Del mismo modo, han tratado de conducir a los elefantes al suroeste del país.
