Cada mexicano, en promedio desecha 1 kilo de cubrebocas cada dos semanas. Si tomamos en cuenta que un cubrebocas pesa entre 4 y 10 gramos, hablamos de 20 cubrebocas desechados en este tiempo. Además de los 450 años que tardan en degradarse.
Autoridades como la directora de comercio internacional de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo, Pamela Coke-Hamilton, afirmó que la contaminación por el plástico es de las mayores amenazas para el planeta y a este problema se le aumenta el uso de cubrebocas desechables desde que comenzó la pandemia.
El problema es que hay oportunidad para el reciclaje de las botellas de plástico, pero todavía no se han especificado acciones para combatir el problema de los cubres. Salvo por la recomendación que han emitido científicos de la Universidad Nacional Autónoma de México, quienes proponen, que, una vez usado el cubrebocas, se corte en pedazos, sobretodo los resortes y se coloquen en una bolsa, para no exponer a otras personas.