Llegó la época de lluvias y con ellos llegaron los mayates, aquellos bichitos cafés que vuelan y chocan contra todo. Ese zumbido nos indica que pese a que vivamos en la ciudad, los mayates siempre serán nuestros compañeros de lluvia.
Sabemos que muchas personas no quieren tener nada que ver con los bichos, pero es importante saber que muchas veces estos animalitos tienen una función fundamental para el ecosistema.
Primero, dejemos claro que no pican ni son venenosos y su función es el de descomponer la materia y oxigenar la tierra. Son atraídos por la luz y cuando llegan a chocar con las paredes caen de espalda y ya no se pueden levantar, lamentablemente mueren al poco tiempo.
